lunes, 28 de marzo de 2011

VER SI TODO INTENTA ESTABLECERSE COHERENTE

CON una luz incandescente, viluminosa y azarosa, me encoentro (eh aquí) con un sabroso festín fugaz, fugacisimo, efímero, espacialmente descolocado. Tal es la agonía de la incertidumbre, del miedo al cambio brusco, la deseada huída de lo estatico, la tensión masticable de lo incorrecto. Tal es así que las ventanas abiertas dejan entrar más frío, y que la despedida es tan derepente que sucede sin haberlo deseado ni un segundo. ¿Como de otra forma haber podido decirle adios? Haberla no la había, al menos me escudo en ello. Es como intentar contemplar un día móvil sobre un mar quieto. Ojalá pueda dibujarla de colores, y captar su figura en todos los planos, para reconocer sus movimientos uno por uno.
Debería sonarle a música clásica los halagos, deberían sonar a ternura, y volcarse en recíproco como alimento del buen humor. Pero todo es raramente torcido, una incoherencia semántica entre el dictar pasional y la inesperada, siempre inesperada, siempre imprevisible "realidad real".
Pero lo bueno de no cumplir la espectativa es que aún puedes volver a elaborarla. Hasta el fin de circunstancias.




Miguel Angel Gutiérrez Sánchez de la Fuente

jueves, 24 de marzo de 2011

Poema al mundo

El aire es frío, y el sol caliene,
Las nubes blancas y de agua,
Los cristales reflejan la luz y
Las estrellas son esferas enormes de fuego.

Todo es más simple de lo que me apetece,
Y es tarea ardua darle un significado
Porque el mundo parece dispuesto
A no revelar nada de sus secretos.

Y lo que no son secretos ya lo conocemos,
Todo es trivial, y a veces confuso,
Mecanico, absurdo e imparable,
Contingente y pasajero, móvil.

El mundo es devenir, tiempo y espacio,
Y me preocupo de no estar en un mundo aburrido.
Y cuando miro un almendro florido de rosa,
O un valle extenso de césped fresco,
O me maravillo con el mecanismo de los animales,
De los órganos, de la química primitiva.

Me asombro de los paisajes llenos de color,
Y de los llenos de sombría penumbra,
Y del sonido de las cosas cotidianas y simples,
Hago que mi vida se un lienzo abstracto

Un torrente de color y posibilidades,
Con un sinfín de únicas y pasajeras interpretaciones
Hago desideraísmo automatico a veces,
Otras prefiero reflexionar sobre la estética de ésta, mi realidad.

martes, 22 de marzo de 2011

¿Arte?

¿Porqué hago arte? sinceramente no se que causa genetica puede explicar mi decantación por el mundo del arte en general, desde la pintura a la musica pasando por cine o teatro, y desde luego por escribir. Pero a menudo que avanza mi ciclo vital me doy cuenta de que la gente a estas alturas se sigue preguntando ¿Qué es arte?.
Y sinceramente, señores, lo veo absurdo. Para mí, la respuesta más válida y universal, y gracias a la cual vengo a decir hoy lo que vengo a decir(que ahora lo diré, primero digo lo siguiente) es aquella que damos a más temprana edad: "¿Arte? arte es...como expresar tus sentimientos". Bravo. Eh ahi!
!Eso!!Eso es arte señores!, ¿tan dificil es de entender?. Porque a menudo la gente confunde una serie de términos, a mi juicio, y se los aplica a ciertas conceptos que refieren técnicas de las que se basa el arte para realizarse. Me explico:
¿Un dibujo es arte? No. Un dibujo puede ser arte, pero no lo es. Porque un dibujo cargado solo de tinta y, como mucho, buena técnica, es un folio con una imagen. No trasciende de lo estético, es una pieza desechable más relegada solo a, para gente con suficiente y despreocupada maña, sorprender a un público. Pero el arte va más allá, tanto, que diría que esta en otra dimensión.
El arte debe estar cargado de hechos, de circunstancias, de pensamiento y de labor espiritual, y no solo de imagen y color. Tiene que cobrar un sentido real en la mente, tiene que llevar pasión alegre o mustia, tiene que llevar un trozo de algo importante en nuestro ser. Pero eso no desposibilita al arte de contener una estética vulgar, sotisficada, común o confusa. Lo estético en el arte de verdad no es la cuantía a tomar en cuenta, es un gran cúmulo de características lo que hace considerar una obra como arte.

Así que, como consejo, hagan de su vida puro arte, y cárguenla de un trozo de pasión desmedida de esos que brotan de lo profundo de cada uno.

Se despide, señores pinguinos, señores camaleones, señorita desnuda del cielo y demás oyentes:


Miguel Ángel Gutiérrez Sánchez de la Fuente

sábado, 19 de marzo de 2011

El círculo de los intelectuales

- Desde luego, estamos aquí para hacer arte. Lo demás es pura automasturbación social y vital. ¿Entiendes?

- Claro, osea, debemos hacer arte, debemos hacer arte del yo, de la experiencia y el sentir personal. No podemos desligarlo de nosotros, porque no merecemos mención sólo a lo estético, el grueso del arte recae en el transmitir, ¿Sabes?

-!Pero eso es puro desideraísmo!

-Efectivamente, puro desideraismo

-¿ Lo entiende ahora?

-Creo que sí


Y esa era la velada del consejo de intelectuales mas extrañamente reunido hasta la fecha de hoy. Gritaron y a nadie le importó, gimieron estelas de pasión y nadie supo de ello, comprendieron que ya no estaban allí y a nadie le importaba. Eran mundos distintos, aparte, hechos para contruir y crear, para dar rienda suelta a la genialidad que necesitaban escupirle a un asfalto seco e inexpresivo.

Alli había 3 artistas.

lunes, 14 de marzo de 2011

Desideraísmo en bruto

TEXTO 1: Nace de nuestra mente un germen que invade el pensamiento artístico de cada uno de nosotros, aquellos a los que un día la inspiración atrajo a la mas superlativa forma de desear generar arte.
Nosotros, cuyo hacer y deshacer comprende una compleja emoción en sinfonía y clave de creatividad. Somos de los que huyeron de la utopía y buscaron el ser en la propia persona, aquellos que se ataron a las raíces de su propio árbol que como fruto nos daba la experimentación.
Somos los que descubrimos el meollo del placer, los que infravaloraron el hedonismo vulgar y expusieron al cubo las más delirantes, fantasiosas y excitantes sensaciones que cupieron en cada segundo de genialidad.
Somos los que desconocen lo que son, y aun, se conocen en la mayoría de sus amplitudes espirituales, e intentan hallar su máxima expresión de amplitud intelectual y metafísica.
Somos cada uno de los olores, colores tactos y sonidos que rodean nuestra realidad y forman parte de nosotros. Jugamos con ellos, los involucramos en una genial copula fugaz y nos otorgan como resultado una gamma extensa y brillante de ideas, que se realizan en nosotros y nos dan un paso más hacia la filosofía unipersonal.
Somos, en fin, desideraistas, que son todo y nada, que son menos que más, más que menos., poco de mucho, mucho de poco y demasiado quizás. Somos el punto de indignación y decepción en encontrar en la frase anterior un vulgar paralogismo que más parece propio de un frustrado e incapaz pensador que de un excepcional grupo de ingenieros de realidades. Asi que siéntase comprendido.
Somos desideraistas.


Fdo: Miguel Ángel Gutiérrez Sánchez de la Fuente